En 1918 en Andalucía, camisetas i love wade se inició una nueva época de movilizaciones en la que miles de jornaleros sin tierra llevaron a cabo ocupaciones de tierras y actos de sabotaje pensando en la factibilidad de una revolución en España. Decenas de miles de huelguistas fueron obligados a regresar a sus trabajos. Sin embargo, camisa cleveland cavaliers fueron inmediatamente detenidos los diferentes miembros de los comités de huelgas y muchos otros sindicalistas y la policía logró detener la segunda huelga antes de que pasara a mayores. También se exigía la liberación de todos los detenidos durante la huelga. El Gobierno de Madrid intentó destruir la huelga al llamar a todos los trabajadores al servicio militar, pero esta llamada no fue atendida puesto que ni siquiera alcanzó a ser publicada en papel. Pero como compensación el gobierno del Conde de Romanones firmó a primeros de abril la jornada laboral de 8 horas para todos los trabajadores.
El sindicato de las imprentas de los periódicos advirtió a los dueños de los diarios de Barcelona que no publicarían ningún tipo de crítica hacia la huelga, Camisetas Indiana Pacers lo que fue conocido como la «censura roja». Las instituciones de Barcelona finalmente debieron ceder ante los huelguistas, puesto que efectivamente la economía catalana (a la sazón, la principal economía del Reino de España) se había visto seriamente afectada. Se puede decir que los ateneos populares o libertarios fueron una verdadera Universidad popular para la clase obrera de todas las edades, donde fue adquiriendo la formación cultural que le había sido negada por su condición social.
Miguel Primo de Rivera era el capitán general de Cataluña cuando dio un golpe de estado, que fue apoyado por el Rey Alfonso XIII. En otra ocasión los anarquistas residentes en Francia decidieron atentar contra Alfonso XIII, siendo descubierto su complot y desbaratado por la policía francesa. Muchos militantes anarquistas tuvieron que refugiarse en Berlín, Bruselas, Londres, Buenos Aires, etc. Mientras tanto un nutrido grupo de militantes tuvo que exiliarse en Francia, Bélgica y Sudamérica. Entre ellos estaban conocidos militantes como Buenaventura Durruti, Francisco Ascaso, Juan García Oliver, Gregorio Jover, etc. Es difícil tener una conversación interesante si siempre repites las mismas respuestas: “jaja”, “ah”, “wow”, “ay”, etc. En las semifinales nacionales se enfrentaron a Texas, el que los expertos preveían como campeón y que contaba con T.J. Los distintos grupos anarquistas que se quedaron en Francia acabarán formando a lo largo de la década la Federación de Grupos Anarquistas de Lengua Española en Francia, precursora de la FAI.
En menos de un año las actividades conspirativas de los anarquistas pusieron a las autoridades francesas en su contra y ésta comenzó a dificultar sus operaciones, e incluso su residencia en el país. En muchos se crean escuelas para los hijos de los trabajadores que incluyen métodos de la pedagogía más avanzada basadas en las propuestas de Francisco Ferrer Guardia. Algunos sectores cuestionan estas ejecuciones calificándolas como métodos bárbaros destinados a infundir el terror entre los indígenas, mientras que otros sostienen que se trataba de excesos de violencia que el rey de España no aprobaba. El gobierno aceptó, pero rechazó liberar a los que estaban aún pendientes de juicio.
Si usted adoraba este artículo y también le gustaría recibir más información sobre La Nación por favor visite nuestro propio sitio.